Desde cuándo el ser humano se lava los dientes

¿Desde cuándo el ser humano se lava los dientes?

Entre los hábitos de higiene que se les enseña a los niños se encuentra el lavarse los dientes todos los días y después de cada comida, con lo que conseguirán mantener una buena salud dental, evitando las caries y otros problemas asociados a la mala higiene bucal.

Antecedentes del lavado de dientes

Sin embargo, lavarse los dientes no es algo a lo que se acostumbrara desde siempre, pese a que a ti pueda sonarte un poco ilógico esto, resulta que los seres humanos con anterioridad no acostumbraban a realizar dicho proceso en sus piezas dentarias.

Como sabemos que ya te ha causado intriga este tema, en las próximas líneas te vamos a contar desde cuándo el ser humano se lava los dientes, algo que actualmente es imprescindible para todos y que realmente no podríamos imaginarnos ya sin hacerlo.

Aunque no existía el lavado de dientes como tal, en la historia las distintas culturas utilizaron diversos métodos para el cuidado de sus dientes, algunos de ellos un poco particulares, que quizás no eran lo más adecuado para la higiene bucal.

Lo primero que debes saber es que en la prehistoria, hace más de 9 mil años, se encontró en Pakistán un cementerio donde se pudo evidenciar que nuestros antepasados se preocupaban por mantener una buena higiene dental, que otra investigación sobre el hombre neandertal confirmó, ya que se evidenció que estos últimos utilizaban palillos para limpiar las ranuras de sus dientes, según los restos arqueológicos hallados.

Después en el Egipto Antiguo se encontró un manuscrito del siglo 4 a.C, donde se indicaba que los egipcios de la época ya limpiaban sus dientes utilizando pimienta, hojas de menta y sal, una fórmula que además podía incluir pómez pulverizada, uñas de buey cáscara de huevo.

En el caso de los egipcios se pudo encontrar en una de las tumbas un artefacto similar al cepillo dental que utilizamos hoy en día, el cual estaba compuesto de una rama con fibras desfiladas.

kit de cepillado de dientes

En cuanto a Grecia y las Romanas Antiguas, la costumbre de ellos era bastante particular, ya que consideraban que para tener una buena higiene dental se debía realizar la misma con orina humana, porque tenían la creencia de que dicha sustancia podía blanquear los dientes.

Otros romanos preferían mantener su higiene dental utilizando polvo de cenizas de huesos de animales, mezclados con arena y hierba, pero en el caso de los asirios antiguos para su higiene dental tenían una práctica más seria, que era limpiarse los dientes utilizando solo sus dedos.

Los Mayas en cambio optaron por hacer su higiene dental utilizando una goma vegetal a la que se le conoce como sicte, pero también las raíces de chacun formaban parte del tratamiento que se aplicaba en los dientes, tratando así caries, halitosis y dolores en los dientes.

Ya al llegar a la Edad Media los pueblos árabes se toman más en serio su salud dental, por lo que la limpieza de los dientes se realiza con harina fina y piedra pómez, hasta que se descubrió que dicha sustancia dañaba el esmalte de los dientes.

Siglo XVI: lavado de los dientes y uso del cepillo

Después de todos los antecedentes mencionados sobre el lavado de dientes, fue hasta el siglo XVI cuando un especialista en higiene dental aconsejo que se lavara la boca con agua fresca en las mañanas, y después de eso enjuagarse, pero con orina humana.

Aunque aún se mantenía la utilización de un elemento tan particular como la orina para el enjuague de la boca, para 1498 se supo del primer cepillo dental de la historia, el cual fue confeccionado por un emperador chino con pelos del cuello de un puerco salvaje, colocados en un mango de hueso, lo que dio paso a otros cepillos hechos con pelos de animales como jabalí, cerdo, tejón y caballo; mientras que para los mangos se utilizó madera, hueso y marfil.

Este cepillo dental fue llevado por los viajeros del siglo XVII a Europa, pero pasó a ser un artículo de lujo exclusivo para la élite de la sociedad, prefiriendo estos los elaborados con crin del caballo por ser más suaves y porque no les generaba irritación ni malestar bucal, como sí ocurría con las cerdas de cerdo.

Des puedes muchos años luchando con los cepillos dentales con cerdas de pelo de animal por tener bacterias, ser muy endebles y muchas disertaciones sobre estos, fue a finales del siglo XIX que se universalizó la utilización del cepillo dental en el mundo occidental, pero que para 1935 se modificó el que se venía conociendo, y finalmente se sustituyeron los pelos animales por nylon resistente y flexible, el cual brindaba una mejor calidad en el cepillado y más resistencia a las bacterias.

En el año 1938 salió al mercado un cepillo elaborado con púas de seda de nylon, el cepillo milagro del Dr. West,  para una mejor higiene bucal, y que posteriormente sería mejorado en gran medida, haciendo que el cepillado respondiera a las necesidades de cada persona.

A partir de este momento el lavado de dientes se popularizó aún más, por lo que podría decirse que fue hasta 1938 que se vio como necesidad que los seres humanos lavaran sus piezas dentales para una mejor higiene, y que gracias a las innovaciones en los cepillos dentales, en ese momento era más sencillo de realizar.

Hoy en día existen distintos tipos de cepillos de dientes, hilo dental, enjuagues, etc., para que el lavado de los dientes y de toda la cavidad bucal sea 100% efectiva, por lo que no hay excusas para no cumplir con este hábito necesario y obligatorio para todos.